El fiscal jefe de la Corte Penal Internacional (CPI) ha dimitido temporalmente hasta que se concluya una investigación por mala conducta sexual en su contra. Karim Khan tomará licencia hasta el final de la investigación externa, que comenzó a finales del año pasado, y sus fiscales adjuntos dirigirán la oficina en su ausencia, según un comunicado de la CPI. Informes anteriores citaron un documento que detalla acusaciones contra el Sr. Khan, entendidas como tocamientos sexuales no deseados y “abuso”. El Sr. Khan ha negado las acusaciones, que fueron reportadas al órgano rector de la corte en octubre del año pasado. Varios organismos y miembros del personal de la CPI habían pedido anteriormente que el Sr. Khan se apartara durante la investigación. Se desconoce cuándo terminará la investigación externa, liderada por la Oficina de Servicios de Supervisión Interna de la ONU. Una fuente anónima le dijo a la agencia de noticias Reuters que el Sr. Khan habló con los investigadores de la ONU la semana pasada para una entrevista final como parte del proceso. Reuters informó que había visto una carta que el Sr. Khan envió a su personal confirmando su licencia temporal, y en la que el fiscal dijo que su posición había sido constantemente revisada. “Mi decisión está motivada por un compromiso profundo e inquebrantable con la credibilidad de nuestra Oficina y la Corte, y por salvaguardar la integridad del proceso y la equidad para todos los involucrados”, habría dicho en la carta. Poco después de que las acusaciones salieran a la luz el año pasado, el Sr. Khan pidió al organismo de control de la CPI, el Mecanismo de Supervisión Independiente (MSI), que llevara a cabo una investigación interna sobre las denuncias. Más tarde, el órgano rector de la corte decidió seguir con una investigación externa para “asegurar un proceso totalmente independiente, imparcial y justo”, según dijo su presidente. La investigación se produce durante una intensa atención sobre la CPI y el Sr. Khan después de su solicitud de órdenes de arresto vinculadas a la guerra entre Israel y Hamas, incluida una para el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu por presuntos crímenes de guerra en Gaza. Israel no es miembro de la CPI y su gobierno, junto con Netanyahu, rechazó firmemente las acusaciones. En febrero de este año, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, impuso sanciones a funcionarios de la CPI mientras Netanyahu visitaba Washington DC. La CPI dijo que las sanciones de EE.UU. ponen en riesgo a la corte misma y llamó a sus estados miembros y a la sociedad civil global a “estar unidos por la justicia y los derechos humanos fundamentales”.
