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Expertos y la inteligencia artificial están de acuerdo en que Pietro Parolin es uno de los favoritos para liderar la Iglesia Católica | Foto: Marco Iacobucci Epp / Shutterstock
Los 133 cardenales de todo el mundo comenzarán a emitir sus votos el miércoles por la tarde en lo que es el cónclave más grande y posiblemente más impredecible que jamás haya tenido lugar en sus 800 años de historia.
Durante los días previos al inicio del cónclave para elegir un nuevo papa, bajo el fresco del techo de La Última Cena de Miguel Ángel en la Capilla Sixtina, los líderes religiosos se conocieron entre sí y, según POLITICO, recurrieron a Hollywood para aprender cómo podría resultar todo.
“Por loco que parezca, algunos de los 133 cardenales vieron la película de Ralph Fiennes, convenientemente titulada ‘Cónclave’ para obtener consejos”, escribió Politico. El New York Times dijo, “En salones suntuosos, días antes de que un cónclave elija a un nuevo papa, los líderes de poder se reunieron para una mezcla de devoción, activismo, dinero y socialización”. Oficialmente, la iglesia católica estaba en medio de un período de duelo de nueve días tras el funeral del Papa Francisco, pero en Roma, también estaba teniendo lugar lo que se ha denominado “Semana de América”.
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Mientras los cardenales se reunían durante días en el Vaticano, contemplando quién debería ser su próximo papa, cientos de católicos estadounidenses y sus aliados europeos establecían redes en galas privadas, haciendo peregrinaciones exclusivas a algunos de los palacios, hoteles e iglesias más finos de Roma.
Lo que sucede en el cónclave, se queda en el cónclave
Los líderes clericales se reunieron una última vez el martes antes de trasladarse a Casa Santa María, donde entregan sus teléfonos móviles y permanecen recluidos del mundo exterior hasta que se elija a un nuevo papa. Los cardenales juran un juramento de secreto, prometiendo no divulgar nunca lo que sucedió detrás de las puertas del cónclave. El castigo por romper este juramento es la excomunión.
Los cardenales participan en dos rondas de votos cada día, una por la mañana y otra por la tarde. Al final de cada votación, sale humo de la chimenea instalada en la parte superior de la Capilla Sixtina. Si el humo es negro, no se ha decidido ningún papa. Si es blanco, entonces la Iglesia Católica tiene un sucesor para el Papa Francisco.
El fresco del techo de La Última Cena de Miguel Ángel en la Capilla Sixtina | Foto: Marcobriviophoto.com / Shutterstock
‘Quien entra como papa, sale como cardenal’
Según el periódico católico Crux, Robert Prevost se ha convertido en un favorito. Crux agregó que es un moderado de los Estados Unidos y es conocido por su juicio sólido y su capacidad de escucha aguda.
Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, también es un favorito para liderar a los 1.4 mil millones de católicos del mundo. Otros favoritos son Luis Antonio Tagle, un reformador de Filipinas apodado “el Francisco asiático”. Y Matteo Zuppi y Pierbattista Pizzaballa, buscadores de paz que han vivido en Jerusalén durante años.
Jean-Claude Hollerich es de Luxemburgo, Timothy Radcliffe es del Reino Unido y Michael Czerny es de Canadá. Péter Erdő de Hungría y Robert Sarah, un cardenal de Guinea que criticó el papado de Francisco, se encuentran en el extremo más tradicionalista.
Entre los que hacen lobby por un sucesor conservador de Francisco se encuentran Raymond Burke, un obispo de Estados Unidos que apoya a Donald Trump, y Gerhard Müller, un alemán que advirtió que la iglesia podría dividirse si no se elige a un papa ortodoxo.
Sin embargo, como dice el viejo refrán de las elecciones papales, “quien entra al cónclave como papa, sale como cardenal”. Caso en punto, Jorge Mario Bergoglio, que no era considerado un contendiente pero se convirtió en el Papa Francisco al final del cónclave.
Pronto sabremos quién será el sucesor del Papa Francisco | Foto: Shutterstock
En una era creciente de inteligencia artificial, preguntemos a Grok
Dado el papel cada vez más importante de la inteligencia artificial en nuestra vida diaria, no podríamos terminar este artículo sin preguntarle a Grok quién cree que será el próximo papa, y esto es lo que respondió:
“Predecir al próximo papa es especulativo, ya que la dinámica del cónclave es secreta e influenciada por factores como la geopolítica, la teología y las relaciones personales entre cardenales,” dijo Grok. “Sin embargo, basándome en los perfiles actuales, la influencia y la alineación con las necesidades de la Iglesia, aquí está mi lista de los cinco candidatos más probables.”
1.- Cardenal Pietro Parolin (Italia, 70)
Por qué: Como Secretario de Estado del Vaticano, es un diplomático experimentado con una profunda experiencia en el Vaticano, visto como un moderado que podría continuar el legado de Francisco mientras une divisiones. Su prominencia en los mercados de apuestas y su origen italiano refuerzan sus posibilidades.
Probabilidades: Altas debido a su visibilidad y apego a la continuidad.
2.- Cardenal Luis Antonio Tagle (Filipinas, 67)
Por qué: Carismático, progresista y pastoral, representa el crecimiento de la Iglesia en Asia. Su enfoque en los pobres se alinea con la visión de Francisco, lo que lo convierte en un fuerte candidato global. Preocupaciones sobre problemas administrativos pasados moderan ligeramente sus probabilidades.
Probabilidades: Fuertes, especialmente para un papa no europeo.
3.- Cardenal Matteo Zuppi (Italia, 69)
Por qué: Un “sacerdote de la calle” progresista centrado en la paz e inclusividad, es muy querido y se alinea con las prioridades de Francisco. Sus raíces italianas y su estilo pastoral lo convierten en un candidato de compromiso para un cónclave dividido.
Probabilidades: Moderadas a altas, ganando impulso.
4.- Cardenal Jean-Marc Aveline (Francia, 66)
Por qué: Un cardenal más joven y progresista centrado en la inmigración y el diálogo interreligioso, es un rostro nuevo que podría atraer a aquellos que buscan la visión de Francisco con una perspectiva europea. La limitada fluidez en italiano es un obstáculo.
Probabilidades: Moderadas, un candidato sorpresa.
5.- Cardenal Fridolin Ambongo Besungu (República Democrática del Congo, 65)
Por qué: Representa a la creciente población católica de África y tiene una voz fuerte en justicia social. Su postura conservadora sobre temas como las bendiciones para parejas del mismo sexo podría apelar a los tradicionalistas, pero podría alienar a los progresistas.
Probabilidades: Menores pero viables para un papado africano histórico.