El base de los Milwaukee Bucks, Damian Lillard, ha dejado de tomar medicación anticoagulante y ha sido autorizado para participar plenamente en actividades de baloncesto, un gran paso adelante en su regreso de la trombosis venosa profunda que lo ha mantenido fuera durante el último mes.
Los Bucks aún no indican exactamente cuándo el jugador, siete veces seleccionado en el all-NBA, podría volver a jugar, aunque ha sido descartado para el primer partido de playoffs. Los Bucks están sembrados en quinto lugar en la Conferencia Este y abren los playoffs el sábado en Indiana contra los Pacers, en cuarto lugar.
“Esto podría haber sido una amenaza para su carrera”, dijo el entrenador de los Bucks, Doc Rivers, el jueves. “O lo fue. El hecho de que hay una muy buena posibilidad de que juegue en los playoffs para nosotros, es un regalo de Dios.”
Lillard jugó por última vez el 18 de marzo. Los Bucks anunciaron una semana después que Lillard tenía trombosis venosa profunda en su pantorrilla derecha y estaba tomando medicación anticoagulante.
La trombosis venosa profunda es un coágulo anormal dentro de un vaso sanguíneo donde la coagulación de la sangre bloquea el flujo de retorno al corazón.
“Estamos encantados por Dame”, dijo el gerente general de los Bucks, Jon Horst, en un comunicado. “Nuestra prioridad siempre ha sido la salud de Dame. Estamos agradecidos a nuestro equipo médico por diagnosticar y tratar su TVP en una etapa temprana, y a los especialistas en hematología de renombre mundial en la Clínica Mayo. Cada paso de la recuperación de Dame ha sido bajo la dirección de profesionales médicos de clase mundial y sus protocolos específicos y estrictos que han permitido el regreso seguro y saludable de Dame al juego.”
El regreso de Lillard le permitió participar en el entrenamiento del jueves de los Bucks.
“Hoy no practicamos mucho en vivo, pero él estuvo en práctica durante todo el día de hoy”, dijo Rivers. “Ahora solo tenemos que ver cómo está físicamente. Va a llevar un tiempo.”
Los compañeros de equipo de Lillard dieron la bienvenida a su regreso a la práctica.
“Obviamente, un gran impulso de moral para nosotros, porque lo necesitamos”, dijo el alero Kyle Kuzma. “Feliz de tenerlo de vuelta pronto.”
Lillard, de 34 años, terminó la temporada regular clasificado en décimo lugar en anotaciones (24.9) y décimo en asistencias (7.1). Este año, obtuvo su novena selección para el All-Star Game.
Los Bucks tuvieron un récord de 10-4 sin Lillard en sus últimos 14 partidos de temporada regular y entran en los playoffs con una racha de ocho victorias consecutivas.
Pero los Bucks saben que son un equipo mucho mejor cuando Lillard está en la cancha.
“Pasamos de pensar que estaba como un 99% fuera a ahora, con signos muy positivos de que va a estar en algún momento”, dijo Rivers.
Rivers dijo que espera que Lillard pueda regresar en algún momento de esta serie, pero agregó: “Simplemente no sé.”
Los Bucks tuvieron un récord de 3-1 contra los Pacers durante la temporada regular. Lillard jugó en cada uno de esos cuatro partidos y promedió 18.3 puntos, 9.3 asistencias y 5.5 rebotes, mientras que disparaba un 35.5% en general y un 38.9% desde la línea de tres puntos.
La posibilidad de que Lillard pueda jugar tan pronto es un desarrollo notable, considerando cuánto tiempo ha dejado fuera a otros jugadores en el pasado.
Victor Wembanyama de los San Antonio Spurs fue diagnosticado con TVP en su hombro después de regresar del All-Star Game el mes pasado y fue rápidamente descartado para la temporada. Los médicos han asegurado a los Spurs que no hay preocupación por la salud a largo plazo de Wembanyama.
La carrera del miembro del Salón de la Fama Chris Bosh se vio truncada después de ser diagnosticado con coágulos sanguíneos mientras jugaba con Miami. Brandon Ingram, ahora con los Toronto Raptors, tuvo su temporada 2018-19 terminada temprano debido a la trombosis venosa profunda cuando estaba con los Lakers de Los Ángeles. Ausar Thompson de Detroit tuvo un problema de coágulos que lo llevó a perderse el final de la temporada 2023-24.