Aproximadamente 1.5 millones de personas miraron cómo coloridas carrozas y gente disfrazada desfiló por la Ciudad de México durante una gran parada para el Día de los Muertos el sábado, según la administración de la ciudad.
En la novena edición del desfile, esqueletos de cartón, alrededor de 8,000 artistas con vestuarios y carrozas decoradas con temas de carnaval recorrieron las calles de la capital mexicana.
El Día de los Muertos, que forma parte del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO, combina elementos prehispánicos y cristianos.
Se cree que el 1 de noviembre, las almas de los niños muertos regresan a la tierra para visitar a sus familias, y las almas de los adultos, el 2 de noviembre.
Las familias visitan los cementerios, donde comen, beben y cantan en las tumbas de sus seres queridos, colocando ofrendas como velas y comida tanto en las tumbas como en los altares de sus casas.
Sin embargo, el desfile en la Ciudad de México es una tradición moderna que empezó en 2016 y fue inspirado por una escena de la película de James Bond “Spectre”.
Gente vestida con trajes tradicionales mexicanos participan en el desfile del Día de los Muertos. Felix Marquez/dpa