ESPAÑA cuenta con 10.197 infraestructuras que podrían verse afectadas por inundaciones severas con un período de recurrencia de 500 años.
Esta es la conclusión de un informe publicado el lunes por el Observatorio de Sostenibilidad, casi un año después de las catastróficas inundaciones del 29 de octubre en Valencia.
El estudio detalla, cuantifica y clasifica instalaciones, servicios y edificios localizados en zonas inundables de España a partir de datos oficiales.
LECTURA ADICIONAL:
DESTRUCCIÓN EN PAIPORTA, 2024
Entre las infraestructuras en la categoría de mayor riesgo se incluyen 420 residencias de ancianos, 1.126 colegios, 114 comisarías de la Policía Nacional, 116 cuarteles de la Guardia Civil, 112 hospitales y 82 instalaciones radiactivas.
Fernando Prieto, director del Observatorio de Sostenibilidad, señaló: “Estas inundaciones con recurrencia de 500 años son las más graves previstas, pero como vimos en 2024 esto puede suceder, ya que la lamina de agua en la DANA de Valencia ocupó 16.000 hectáreas por encima de los pronósticos más pesimistas”.
El informe estima que el 71% de las infraestructuras ubicadas dentro de áreas inundables con recurrencia de 500 años se encuentran en una situación de peligro ‘muy grave’, el 13% en una situación grave y el 16% en una situación leve.
Según cifras del Ministerio para la Transición Ecológica, existen 7.223 infraestructuras con amenaza de inundación ‘muy grave’.
Desglosado por comunidades autónomas, el 37% se encuentra en Cataluña, seguido por un 16% en Galicia, siendo estas dos las únicas regiones que presentan porcentajes de dos dígitos.
Les siguen el País Vasco, con un 8%; Andalucía, con un 7%; Castilla y León, con un 6%; Murcia, con un 5%; mientras que la Comunidad Valenciana y Aragón registran ambas un 4%.
Prieto comentó al respecto: “Cataluña destaca debido a que posee un tejido urbano más denso”.
El Observatorio de Sostenibilidad afirma que las grandes inundaciones provocan pérdidas significativas de vidas humanas, ecológicas y económicas, y que este tipo de fenómenos meteorológicos extremos, unido a la falta de planificación, se ha convertido en el mayor riesgo asociado al cambio climático en España.
Añade que ‘una de las primeras medidas para adaptarse al cambio climático debe ser la protección de las poblaciones más vulnerables y de las infraestructuras críticas’.
Asimismo, hizo un llamamiento para el establecimiento de procedimientos de alerta temprana ante inundaciones con ‘protocolos claros y estrictos’.
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